Inflación y Cepo: CEDEARs: La Inversión del Momento

   En esta quinta edición de Inflación y Cepo, vamos a analizar en profundidad a los CEDEAR como alternativa de inversión . En la próxima entrega vamos a continuar con el cronograma para discutir el mercado inmobiliario. 

   Con la tasa de inflación del peso argentino por las nubes (estimada a 2012 en 27%), surge la necesidad del ahorrista de protegerse de alguna manera. Según una encuesta de la revista Inversor Global, el 65% de los ahorristas argentinos invierte en el dólar. Ahora, con el cepo cambiario en posición (¿o será un invento mediático?), virtualmente imposibilitando el acceso a la moneda norteamericana, es necesario pensar alternativas más creativas para proteger los ahorros. Hoy vamos a repasar una alternativa que nos permite invertir pesos en una inversión 'atada' al dólar. 

CEDEARs: 

¿Qué son?

   En artículos anteriores hemos mencionado a los CEDEARs como una alternativa de inversión interesante en el contexto en el que vivimos. Los Certificados de Depósito Argentino son instrumentos que cotizan en el MERVAL y representan una acción o una fracción de una acción. En términos simples, es equivalente a comprar una parte (o el total) de una acción de una empresa multinacional de la talla de Apple, IBM, Google o Chevron.

   En líneas generales, los CEDEARs corresponden a corporaciones multinacionales, en muchos casos globales, que ofrecen una amplia trayectoria y un riesgo relativamente diversificado. La mera cantidad de CEDEARs (varios cientos) permite armar carteras (combinación de acciones, bonos, etc.) diversificadas, al poder invertir en empresas de sectores y perfiles variados. 

¿Porqué son importantes?

   El elemento relevante que convierte a los CEDEARs en una alternativa interesante para el inversor argentino es que cotizan en pesos pero representan un activo que cotiza en dólares en las bolsas de valores más importantes del mundo. Esto, conjuntamente con la posibilidad de pedir la transformación del CEDEAR en la acción subyacente, los convierten en un activo atado directamente al dólar, o más precisamente, al dólar blue. 

  Lo anterior implica que, desde el punto de vista del inversor argentino, comprar CEDEARs es equivalente a comprar dólares al tipo de cambio blue e invertirlos; sin hablar de que es completamente legal. Esto significa que si la cartera elegida tiene un rendimiento anual del 10% (aproximadamente el rendimiento promedio anual del S&P500 en los últimos 30 años) y la devaluación del peso  respecto del dólar blue es del 30% anual (por ejemplo), la rentabilidad obtenida será de aproximadamente 43%. Comparar este número contra la mejor tasa de interés de un plazo fijo a 365 días (la tasa más alta que se publica), que actualmente se encuentra en el 19%, muestra claramente la ventaja de invertir en estos activos, sin contar otras desventajas de invertir en plazos fijos como, por ejemplo, la poca liquidez. 
   Desde el punto de vista técnico, representan lo que se conoce como un activo de "renta variable", lo cual implica que los ingresos que se perciben de dicho activo fluctúan en el tiempo. Esto es en contrapartida con los bonos y plazos fijos, que son considerados "renta fija" al pagar un interés establecido (aunque en ocasiones la tasa puede ser variable, como los instrumentos que ajustan a través de la tasa Badlar). Mientras que con renta fija se sabe de antemano cómo van a constituirse los flujos que se recibirán (en artículos previos discutimos cómo se comportan los bonos), en las acciones la rentabilidad depende de los dividendos, los cuales varían según la valuación y los resultados obtenidos por la empresa (aunque muchas empresas nisiquiera pagan dividendos), y la cotización de mercado de la acción. Esto implica que las carteras de "renta variable" tienen, en principio, un nivel más elevado de riesgo y variabilidad, haciendo complejo estimar su rendimiento. 
  Sin embargo, dichas carteras son activos líquidos que permiten retirar la inversión en cualquier momento con un castigo mínimo (las comisiones que apliquen). Esto implica que, a diferencia de un plazo fijo, si se requieren los fondos inesperadamente es fácil recuperarlos en tiempos relativamente cortos (24 hs o menos). 
   A continuación se puede apreciar una análisis simplista pero interesante basado en lo discutido hasta ahora donde se comparan las alternativas más comunes de inversión que se le presentan al ahorrista argentino: 

   En la comparación encontramos a los Plazos Fijos, Bonos, Acciones y Compra de dólares (Blue) como las alternativas 'comparables' de ahorro. Y como se puede apreciar, en términos de rentabilidad, riesgo y liquidez, los CEDEARs son la alternativa más completa. 

¿Cómo hago para invertir en ellos? 

   Bueno, me convencí: Los CEDEARs suenan interesantes. ¿Qué hago ahora?
  La interrogante surge de intentar entender cómo decidir qué comprar. Tomar estas decisiones implica un mundo de posibilidades, y para desenredar ese mundo se requiere de un análisis previo y de definir qué es lo que se busca con la inversión: Proteger los ahorros, diversificar el riesgo, maximizar la rentabilidad, etc. 
   Todas esas preguntas tienen muchas respuestas diferentes. Para simplificar el problema vamos a dividir las alternativas en dos: 

Mandarte Solo

   Supongamos que te divierte aprender sobre la bolsa y manejar tus ahorros, por lo que decidís dar salto y mandarte solo. ¿Por dónde empezás?
   Antes que nada, es necesario entender que esta alternativa implica una serie de riesgos importantes, empezando por que a grandes rasgos sería comparable con intentar construir esa habitación extra en la casa sin tener conocimientos de ingeniería u obras: implicaría un esfuerzo por desarrollar habilidades inexistentes hasta el momento y acarrearía el riesgo de ser un novato a la hora de aplicarlas. Y aunque no estamos poniendo en riesgo la vida de nuestros familiares, los ahorros son motivo de esfuerzo y fuente de tranquilidad, por lo que no dejan de ser importantes. Igualmente, y volviendo a la metáfora, tampoco llamamos a un electricista para cambiar una bombilla cada vez que se quema, por lo que mandarte solo puede resultar económicamente eficiente en volúmenes pequeños de capital ya que contratar a alguien capacitado para manejarlos sería inviable. 
  Ahora bien, si se tiene el tiempo, el interés y las herramientas adecuadas, casi cualquiera puede volverse un inversor suficientemente capacitado. Con esto no quiero decir que es fácil hacerse rico, sino que se puede aprender lo suficiente como para administrar los ahorros propios y obtener rendimientos aceptables. Y si no se quieren correr muchos riesgos y la expectativa de rentabilidad es realista, incluso invirtiendo al azar se podrían lograr buenos resultados. El mantra que hay que adoptar es: "Diversificar e Invertir, no Concentrar ni Apostar". 
  Para poder invertir en CEDEARs es necesario poder negociar en la bolsa. Como discutimos en artículos anteriores, hacerlo requiere poco esfuerzo e incluso no demasiados fondos (hacer click en el link para acceder a un tutorial simple de cómo abrir una cuenta en un broker online). 
   En posts futuros vamos a ahondar en cómo empezar a aprender a invertir, por ahora tendrá que ser suficiente con entender que es una alternativa. 

Asesorarte Profesionalmente

• FCI que inviertan en CEDEAR   

   Si 'mandarte solo' no es una alternativa atractiva y no dispones de una cantidad de capital elevada, sigue existiendo una opción eficiente: Los fondos comunes de inversión que inviertan en CEDEARs. Los FCI funcionan como un pool de dinero proveniente de diferentes fuentes que es administrado por un ente único que cobra una comisión por hacerlo. El objetivo de los fondos es desarrollar la estrategia que maximice el atractivo del fondo (rentabilidad, confianza, estabilidad, etc.) para poder atraer la mayor cantidad de clientes/capital posible, permitiéndoles de esta manera maximizar lo que ganan en comisiones. 
    La mayoría de los bancos poseen FCI a los cuales se puede suscribir desde la interfaz del Homebanking, siendo una alternativa cómoda y simple. Si los bancos de los cuales son clientes carecen de un FCI que invierta en CEDEARs, también se puede abrir una cuenta de inversión en algún otro administrador que si lo tenga (Aquí pueden ver qué FCI existen en el país). 
    Igualmente, hay que tener en cuenta que con la resolución de la CNV que coloca nuevas limitación a los FCI que invierten en CEDEARs ésta alternativa se vuelve menos eficiente si se quiere invertir en estos. Esto sin mencionar que probablemente a futuro se puedan crear nuevas restricciones. 

• Contratar a un Asesor Financiero

 Esta alternativa ofrece muchas ventajas: experiencia, foco, consejos, consulta, administración, etc; convirtiéndose en la alternativa más recomendable. Por otro lado,  la mayor desventaja es que es costosa, sobretodo para volúmenes limitado de capital. 
    Para los que se encuentren dentro de ésa restricción, igual hay alternativas sub-par como contratar asesores de bajo costo (que manejan cientos de carteras) que ofrecen perfiles estructurados de inversión (bajo riesgo, alto riesgo, mundial, sudamérica, etc.). En general es cuestión de acercarse a algunos brokers (sobretodo pequeños) y averiguar cuales son los requerimientos mínimos para abrir una cuenta gestionada por ellos.